La pandemia nos ha pillado con el pie cambiado. Esto es algo que como sociedad no imaginábamos previamente y para la que no estábamos del todo preparados. Hay que considerar que somos una sociedad que vive de espaldas a la muerte. Esto ya traía problemas previamente pero ahora está destapando viejas heridas, duelos no resueltos y pérdidas no elaboradas a todos los niveles. Porque una pérdida también es una separación o el cese de la actividad laboral.
Sanitarios que están viviendo cada día la peor cara del sufrimiento humano. Algunos doblando y triplicando turnos…. Muchos eran prácticos que están soportando unos niveles de estrés y responsabilidad insólitos, haciendo en muchos casos un trabajo que no era su especialidad.
Los que más están sufriendo las graves consecuencias sociales de la pandemia de una manera más cruda son aquellos que padecen trastorno mental. Una posibilidad de la que ningún ser humano está exento.
La Pandemia y las situaciones de aislamiento prolongado asociadas a ésta están empeorando los problemas pre-existentes y están generando otros nuevos. Las nuevas tecnologías nos han permitido tener algo de relación social pero el contacto real nunca es sustituible. Los especialistas en salud mental tenemos también un reto, que parte del mismo que tenemos como sociedad.
Un resumen de esta situación aparece bastante bien reflejada en el documental emitido recientemente desde Crónicas en TVE y que se puede acceder a través del siguiente ENLACE
No dejes de pedir ayuda, no dejes de contactar con los que quieres.
Cheli López, Psicólogo.